Invierno

lunes, 7 de diciembre de 2009

Esta mañana, según salía de casa, había un olor determinado. Olor a frío. Es muy posible que no os suene este olor o que digáis: Tiene que haber una explicación científica para ese olor, lo provocará esto y esto y bla, bla, bla... Yo por mi parte, prefiero quedarme con esa idea, ya que es un olor que me encanta. Sí, tiene algún inconveniente como que hace frío por ejemplo, aunque en un primer momento es impresionante.

Además de esto, el frío, aunque más bien el invierno, tiene otras cosas buenas. Puedes encerrarte una tarde entera en un bar a la irlandesa, con tu pinta de cerveza en la mano y charlando sobre cualquier bobada. Los minutos pasan volando, te lo aseguro. También puedes quedarte sentado en tu sofá y ver una peli, o una serie, o lo que sea. Se pueden hacer muchas cosas, pero te dan ganas de que sea algo tranquilo. Es lo que tiene el invierno y yo creo que deberíamos hibernar, no nos vendría tan mal.

Buenas noches

1 comentarios:

Nacho dijo...

Creo que tienes mucha razón en eso que comentas de "olor a frío". Es un olor indescriptible, quizás gélido, o tal vez penetrante...no sé, el caso es que en invierno, cuando sales de casa prontito con las manos en los bolsillos y protegiendo tu rostro al calor de tu bufanda, hueles a frío, y, aunque tienes los huesos congelados y piensas "qué coño hago a estas horas aquí", al menos a mí, me gusta ese olor...

Como bien dices, el invierno también tiene sus cosas buenas, aunque algunas personas no lo crean, y es que hay que intentar ver la parte positiva de todo. Anda que no da placer estar una tarde de domingo viendo tranquilamente la televisión, o leyendo, calentito, mirar la ventana y ver cómo la noche se va adueñando del día. O estar en un pub en animada conversación con un grupo de amigos, alrededor de unas cervezas y unos "panchitos" hablando de nuestras cosas.

Un saludo,
Nacho