La revolución del 3D

miércoles, 30 de diciembre de 2009

Acabo de llegar de ver la nueva película de James Cameron: Avatar. Dos horas y media (sí, ya se que parece mucho tiempo) que se te pasan volando entre una mezcla de humanos, alienígenas de color azul (que creo que son más humanos que los propios humanos, nosotros) bichos y plantas de todos los colores y especies y un sinfín de efectos especiales que logran crear este planeta de fantasía (llamémoslo así).

No os voy a desvelar la película, faltaría más, además prefiero que la veáis porque desde luego que han sido bien empleados esos trescientos millones de dólares (mejor que en armas...) y este gran hombre debería recuperar el dinero que le han prestado (y ya de paso ganarse algún sueldo y fama extra, a parte de los que ya tenía). Sobre lo de las tres dimensiones (lo de las gafitas esas feísimas que hacen que parezca que te llueve encima, que las balas van dirigidas a tu cara o que los malditos bichos pasen rozándote la cabezota) que voy a deciros. Pues muy sencillo, voy a deciros lo que pensaba y lo que ahora pienso.

La primera vez que vi una película en tres dimensiones fue con nueve o diez años, creo recordar aunque no estoy muy seguro de ello. Fue en Barcelona, haciendo una visita a mis primos, y entonces aquello era toda una novedad. En realidad la película que vimos no era tan especial, es más, era más bien una demostración de que lo de las tres dimensiones era de verdad. La siguiente vez fue en el parque de la Warner, en Madrid (no es por hacer publicidad ni nada). Allí había una película en 3D de la máscara y entramos a verla pero tampoco era gran cosa. La última vez, fue en la ciudad de las artes y de las ciencias de Valencia. Igual que en Barcelona, la película no tenía gran cosa; pero entonces llegó el día de hoy, que ya es ayer.

Me he dado cuenta de que, a pesar de lo molesto de las gafas, tampoco está tan mal ver una película en tres dimensiones. Pero lo que es más importante, es un duro golpe contra la piratería, sí. Ya me contarás tú, como pretenderán ahora hacer copias de una película hecha en 3D. ¿Van a poner las gafas delante de la cámara? No creo. A no ser que consigan inventar un filtro para cámaras de video que permita grabar desde las tres dimensiones en dos dimensiones, me temo que lo de la piratería se va a tener que limitar a la música y a las películas antiguas (o que no se hagan en 3D).

Pues eso, en un mundo en el que últimamente parece que la tecnología es lo peor del mundo y que ya no existirá ni libertad ni creatividad y que para conseguir lo segundo hay que prescindir de lo primero o viceversa, sin embargo, parece existir una serie de gente que sigue empleando su pequeña parte de creatividad en evitar que esto suceda y que no tengamos que elegir entre ninguna de estas cosas, que a mi modo de ver, son necesarias para seguir siendo lo que somos (y así de paso puedo seguir escribiendo en mi blog, por lo menos en lo que dure la creatividad).

Como dudo que pueda escribir el día de Nochevieja, os deseo a todos un feliz 2010 y que esta década en la que entramos podamos recordarla por nuevos presidentes de distintas razas en otros países occidentales, por el fin de alguna que otra guerra y no por tanto hambre, tanta miseria y tantos atentados terroristas.


Navidad

martes, 22 de diciembre de 2009

La verdad es que no se de que hablar hoy. Llevo unos cuantos días un poquillo ocupado y en los próximos seguramente me tendré que marchar y lo de Internet todavía no llega a todas partes así que no podré escribir. Quién me lo iba a decir, cuando no es por tiempo es por imposibilidad de hacerlo. Como para poner como excusa aquello de la inspiración.

Estamos en Navidad, supuestamente es de lo que debería hablar. ¿En qué pensamos cuando oímos esta palabra? Lo primero que se nos viene a la cabeza son un montón de luces, algún Papá Nöel, regalos, turrón, etc. A mí, últimamente, lo primero que se me viene a la cabeza es: ¿Por qué coño cada año empieza antes la dichosa Navidad? Lo que me parece más divertido de todo esto son las informaciones de las dos semanas antes: "La mayoría ha dejado lo de los regalos para última hora y bla bla bla..." Pero cómo que para última hora, si Navidad antes era un día (o dos si cuentas Nochebuena). Es lo que tiene, ahora parece que dura un mes y medio, y ya no hablemos de la famosa Lotería navideña.

Hoy escuchando a los loteros (en realidad más loteras) que hablaban de los clientes a quienes habían vendido sus décimos mencionaban que algunos habían sido vendidos en julio o agosto. No esta mal para ser una lotería navideña, nada mal.

Podría ponerme a pronunciar el típico discurso navideño que queda tan bien sobre el consumismo y bla bla bla... Pero haré otro. Qué tiene de malo gastarse algo de dinero en regalos para las personas a las que queremos. Puede que les hagamos un favor a las grandes superficies (o a las pequeñas tiendas a las que ahora les va tan mal) pero al fin y al cabo están para eso.

Que le vamos a hacer. Yo por mi parte espero que paséis una muy feliz Navidad y que os regalen muchas cosas. Volveré para contaros si tengo algún regalo interesante.


Friends

domingo, 20 de diciembre de 2009

Volver a ver a los viejos amigos siempre ha sido algo que me ha gustado. Recordar antiguas andadurías o contarse las últimas noticias nunca viene mal, y te echas unas risas.



Felices fiestas 2009

miércoles, 16 de diciembre de 2009

Nunca he escrito dos veces el mismo día y hoy, aunque no sea así, me parece que lo estoy haciendo. ¿Por qué? Pues nunca se sabe. Un día te van las cosas mal y te agobias, pensando que nunca llegará esa salida esperada, pero los peores días son aquellos en los que, cuando creías haber encontrado la salida, te das cuenta de que estás en otra habitación más. En un principio te ciega la luz, pero cuando logras acostumbrarte, comprendes que llevas tanto tiempo en la oscuridad que la luz del sol entrando por una simple ventana hace que pierdas la noción del espacio durante un tiempo.

Toca volver a empezar. Ponerse a buscar una nueva salida de este rompecabezas sin fin. Un rompecabezas que al mismo tiempo es como el cubo de rubik. No tiene una única cara sino que tiene seis, y estas a su vez están divididas en nueve pequeños cuadrados. Parece un algo interminable, que puede con nosotros. Dan ganas de rendirse, sin duda. Pero el tiempo se agota. El oxígeno se convierte en dióxido de carbono (y el agujero de la capa de ozono se hace cada vez más grande, que pena que no sirva para salir de esta).

Pero, que le vamos a hacer, ¿vamos a lamentarnos por nuestra situación? Por Dios. Todos han pasado por lo mismo (o pasarán) y algunos supieron aprovecharlo y se pusieron a escribir en las paredes de la sala instrucciones para los siguientes visitantes. Otros dieron su vida para evitar que lo mismo le ocurriera a otros. Puede que incluso alguno, después de salir, volviera atrás para ayudar a un compañero.

Esto es así, como que aquello esta más lejos que esto. No se si os gustará o si lo entenderéis. Sinceramente, no me importa. Es algo que tenía que escribir.

Ya cambiando de tema, felices fiestas a todos los que leáis esta cosa y a los que aún les quede tiempo por trabajar, que no se queden a mitad del túnel. La Navidad ya os la felicitaré cuando toque.


20 aniversario de Cercanías Renfe

martes, 15 de diciembre de 2009

...y de repente, silencio.

El tren se para, en medio de la nada. Se encienden las luces, se escucha una especie de vapor siendo soltado por debajo de nosotros y se para todo. Por un momento, los pasajeros parecen aturdidos. Como si se encontraran en un sueño del que no pueden salir. Algunos dejan momentáneamente sus lecturas para levantar la mirada un segundo y, al tiempo, vuelven a sus asuntos. Un anciano se levanta, de una manera tan elaborada que parece hasta cómico. Se dirige de una ventana hacia otra, aunque no logre distinguir nada extraño.

Cuando parece que al fin hay silencio, se empieza a escuchar la música de los auriculares de un chico. Una música horrible, rápida, con voces agudísimas de mujeres e incluso monstruosa. Es lo único que se puede oír en el vagón. Todos, poco a poco, giran la vista hacia él, que no parece inmutarse. Por un momento pienso: "No le habrán enseñado a éste que los cascos son para que uno escuche música y no para que la escuchen los demás." Si al menos fuera música decente...

Mientras tanto, fuera, se puede ver la autopista y los coches pasando. Personas que llegarán a su hora a sus casas; a su comida recién hecha y su calefacción. Una chica vuelve a mirar hacia atrás. Disimula cuando me doy cuenta haciendo que mira al chico de la música pero no parece ser cierto. Me entran ganas de decirle algo, pero en esos momentos no te atreves. ¿Qué estará pensando?

Si al menos hubiera traído un libro tendría algo que hacer. ¡Y mira que lo pensé antes de salir! Pero nunca hay tiempo de nada. Por fin el mensaje del conductor: Primero una detención. A los quince minutos un cambio de tren. ¿Para que prepararse para estas emergencias? Seguro que no vale la pena... Pasamos con una pasarela al otro tren y no nos volveremos a ver. Lo mejor fue descubrir que el anciano pretendía saltar del tren al arcén e ir andando hasta su casa.

Divertido al fin y al cabo.


Discovering Twitter

jueves, 10 de diciembre de 2009

Hoy me he hecho una cuenta en Twitter. Sin venir a cuento. Estaba viendo al gran David Letterman y de repente sacó el tema en su programa, la verdad es que es muy gracioso. Los que tengáis mi tuenti solo tenéis que ir a mi última entrada y darle al play, eso si, está en inglés ya os aviso.

Como os iba diciendo, he entrado en este pequeño mundo (si se le puede llamar pequeño) dentro del gran mundo que es Internet. En un principio te ocurre lo que a David Letterman. Te parece que es algo sin ningún sentido, pero cuando empiezas a entrar dentro del juego de este portal, cada vez es más complicado salir y creo que a partir de mañana (que empieza en unos minutos y que para vosotros será hoy) estaré enganchado a él. Os recomiendo crearos una cuenta. No solo porque os guste o no, sino también porque, joder, no tengo ningún seguidor.

En fin, no os meteré más cosas en la cabeza hoy que mañana me toca madrugar y continuar con las entrevistas. Ahora, voy a escribir por primera vez en el famoso Twitter y a formar parte de él.

Buenas noches.


Memorias de agua

martes, 8 de diciembre de 2009

¿Nunca os habéis preguntado qué pasaría si pudierais borrar por completo un recuerdo de vuestra memoria? Seguramente os gustaría recuperar uno que ya hubiéramos perdido y que fuera importante pero, ¿y borrar una pequeña (o gran) parte de nuestra vida?

Podríamos quitarnos de una vez ese maldito recuerdo que una y otra vez vuelve a nuestra cabeza o, cuando una relación salga mal, simplemente desaparecería y no tendríamos que pasar por el mal trago posterior. También podría utilizarse para empezar de cero esa misma relación y no cometer los mismos errores que anteriormente. Sin embargo, para esto habría que saber en que momento la relación está a punto de acabar. En mi opinión existe una frase que cuando os la digan (generalmente al género masculino y sin venir a cuento) os provocará un estremecimiento completo del cuerpo: "Tenemos que hablar".

Podéis intentar haceros los listos diciendo: "Claro, todo el mundo necesita hablar, es una necesidad humana." Pero en ese momento ya no sirve. La cadena se ha puesto en marcha y cada vez avanza más rápido hacia el producto final sin apenas pasar por intermediarios ni descansos del personal, es más, en algunos momentos hasta tu mismo sin darte cuenta aceleras el proceso. La cagas.

Es el curso natural de las cosas, el río fluye siempre por su mismo cauce y en algunos momentos presenta aguas rápidas y complicadas de navegar. En ocasiones incluso cascadas, pero al final siempre se encuentra el mar. Tranquilo, observa al río que, trabajosamente ha logrado llegar, gota a gota, hasta su destino. Un destino que no puede cambiar. Intenta buscar otros caminos, evaporarse, pero las nubes terminan volviendo a dejarle en su sitio o incluso acelerar el proceso que quería frenar arrojándolo contra el agua salada, sin ton ni son.

El agua intenta colarse en todas partes, se refugia en un lago alejado de la costa, se marcha hacia el norte para convertirse en hielo, incluso se funde con las plantas o con las personas mismas, pero sabe que todo es un ciclo. Terminará en el mar inevitablemente.

Todos los caminos llevan a Roma, así que dejémonos llevar y disfrutemos el que nos toque.


Invierno

lunes, 7 de diciembre de 2009

Esta mañana, según salía de casa, había un olor determinado. Olor a frío. Es muy posible que no os suene este olor o que digáis: Tiene que haber una explicación científica para ese olor, lo provocará esto y esto y bla, bla, bla... Yo por mi parte, prefiero quedarme con esa idea, ya que es un olor que me encanta. Sí, tiene algún inconveniente como que hace frío por ejemplo, aunque en un primer momento es impresionante.

Además de esto, el frío, aunque más bien el invierno, tiene otras cosas buenas. Puedes encerrarte una tarde entera en un bar a la irlandesa, con tu pinta de cerveza en la mano y charlando sobre cualquier bobada. Los minutos pasan volando, te lo aseguro. También puedes quedarte sentado en tu sofá y ver una peli, o una serie, o lo que sea. Se pueden hacer muchas cosas, pero te dan ganas de que sea algo tranquilo. Es lo que tiene el invierno y yo creo que deberíamos hibernar, no nos vendría tan mal.

Buenas noches


Lazos

viernes, 4 de diciembre de 2009

Me gusta hacer entrevistas. Hace unas semanas, cuando empezamos el curso, pensaba que este primer cuatrimestre, e incluso este primer año, iban a ser muy generales y apenas íbamos a tener "trabajo de campo". Y, sinceramente, eso es lo que a mí me gusta. Hoy me decía el padre de un amigo que si era tan sencillo conseguir a gente importante. Que si se "dejaban". Lo cierto es que en ese momento por poco no me eché a reír, pero una vez lo piensas después te das cuenta de que tú mismo, unas pocas semanas antes estabas diciendo: "¿Cómo coño vamos a conseguir estas entrevistas? ¿A lo mejor podemos entrevistar a mi abuelo, al tuyo y al tuyo? Pero, poco a poco, aparece una charla aquí, un amigo del primo de un amigo de la mejor amiga de tu hermano.

Todos estamos conectados. Más cerca o más lejos, existen lazos que unen a las personas. Es más, en mi opinión existen distintos tipos de lazos. Algunos lazos tenemos que irlos fortaleciendo nosotros mismos. Puede que simplemente acerquemos el lazo un pequeño momento para dirigir un corto "hola" a nuestro vecino o para hablar con un tendero al que queremos comprar un objeto interesante. Existen otros lazos que nos gusta que sean más grandes, más cortos, para tener a las personas más cerca, aunque siempre puede ocurrir que estos lazos se rompan. La tela se deteriora, se rasga, se llega a romper. Pero para eso están las agujas, ¿no?

Espero que tengáis agujas suficientes en casa y, eso sí, no uséis dedal. Estoy seguro de que vale la pena pincharse el dedo, incluso más de una vez, pero que luego quede la costura bien hecha.

Buenas noches.


Fotografía y photoshop

miércoles, 2 de diciembre de 2009

Como puede que os haya mencionado alguna vez anteriormente, me gusta la fotografía. Es más, podría decir que me encanta. No se si alguno de los que leéis mi foro, diaria o casualmente, seréis aficionados (o profesionales) a la fotografía pero, para los que no lo sean, intentaré explicarlo desde lo más básico.

La fotografía consiste en plasmar una imagen real en un soporte determinado, mediante la captación de la luz por parte de un sensor. Este soporte puede ser digital o analógico por supuesto, aunque dudo que alguno de vosotros conserve una de esas cámaras antiguas. Pues bien, una vez sabemos esto podemos afirmar que una fotografía sería algo así como una representación de una "escena" de la realidad. El problema surge cuando pensamos que esta "escena" es una escena real. Hoy en día, y ayer ya hablaba de ello, mediante el uso de diversos programas (como el Photoshop, Lightroom o incluso el Paint que todos conocemos) podemos distorsionar una de estas escenas tomadas de la vida cotidiana (o no) y convertirla en algo diferente, aunque sea en una pequeña proporción.

Por un momento, nos convertimos en dioses de la escena. El fotógrafo no es el simple autor de una obra, de una fotografía, sino que es su creador. El dueño de su existencia. Somos capaces de convertir a la más guapa en la más fea, aunque casi siempre ocurre de manera contraria, de representar a alguien en los lugares más alejados o incluso, de crear personajes impensables partiendo de un retrato de alguien.

Lo que yo me pregunto es: ¿Es bueno sentirnos dioses aunque se trate de algo que puede no afectar a nadie? No voy a impedir que vosotros también contestéis a esta pregunta pero, en mi opinión, esto nunca puede ser bueno. Al fin y al cabo, y dentro de nuestras limitaciones, todos somos iguales y quienes creen no serlo, ya sea pensando que están por encima o por debajo de los demás, me temo que no se merecen el respeto de nadie.

Muchas gracias.


Photoshop

martes, 1 de diciembre de 2009

Siento escribir tan tarde y tan poco pero últimamente he tenido poco tiempo y las partidas de póker de por las noches me quitan también bastante. He de decir, eso sí, que en las últimas cuatro no he perdido dinero. Es más, en tres de las cuatro he ganado. No diré cuanto para no ofender a los no-capitalistas de por aquí.

La verdad es que en estos momentos de lo único que tengo ganas es de acostarme y ganar tiempo de sueño perdido (sino luego termino quedándome dormido en el autobús) así que no voy a escribir mucho. Simplemente diré que he logrado conseguir por fin el photoshop CS4. Para quien no sepa lo que es, se trata de un programa con el cual retocar imágenes. Ya que voy a utilizarlo como fotógrafo para mejorar las mismas fotografías (valga la redundancia) me parece que no hago un mal uso de él; pero, sin embargo, me parece una falta de respeto y de ética lo que algunos fotógrafos de determinado tipo de revistas hacen con las imágenes de sus modelos. Retocado hasta el blanco de los ojos.

Muchas gracias y mañana prometo más.